un artículo a favor de RD en el plural

UPyD y Díaz Berbel, una bomba para el PP

Cuando un puñado de hombres y mujeres deciden separarse del camino impuesto por este fosco y desaliñado bipartidismo en el que vive la nación desde la desaparición de Unión de Centro Democrático, en ocasiones caen en el desaliento y otras, las que más, optan por crear grupos políticos que no pueden evitar la tentación de parecerse muy mucho a socialistas o populares.

En ocasiones, los esquilmados por los recios argumentos y la férrea disciplina de ambos partidos, se afanan en coger un poquito de aquí y de allá, lo mejor de cada casa, para confundir al ciudadano y proclamar a los cuatro vientos que ellos son un partido diferente, una forma de pensar diferente. En la mayoría de casos, es una mentira muy bien sazonada, pero una mentira al fin y al cabo.

En las últimas semanas, sobre todo tras la aparición de mi último artículo en el que se desvelaba la secreta intención a voces de UPyD de recuperar a Díaz Berbel para la práctica política, se han escuchado voces críticas de diferente pelaje, que aludían precisamente a lo que se acaba de exponer: que lo de Rosa Díez es un fatuo intento de coger lo mejor de cada casa para intentar fastidiar en votos a los populares y a los socialistas. Que un cementerio de elefantes no es el más preclaro camino para demostrar a la ciudadanía que su partido está compuesto por políticos nuevos, gentes sin contaminar.

Pero esas críticas, claro está, provienen de los nervios. Los dirigentes del PP en Andalucía, y no digamos los socialistas, mueven ficha bajo las sombras, tras los cortinajes, a cada golpe de artículo, con cada rumor en la calle, con algún atisbo de lucidez en quien viene pisando fuerte. Y se les nota: Arenas repitió hace seis días el mismo discurso de siempre, pero con una novedad: está convencido que la renovación de candidatos le dará la Diputación de, al menos, tres provincias andaluzas. Soñar es gratis.

Todos los críticos caen en el mismo error: se afanan en destruir la imagen de la que fuera Diputada, Consejera de Euskadi y Eurodiputada, de la misma manera: enfangando sus pies. En noviembre de 1997 intentaron algo más los violentos, mandándole un paquete bomba que no explotó por su rudimentario y obsoleto mecanismo. Lejos de comparar a los asesinos con los críticos, fíjese el lector si las críticas acerca de sus futuribles candidatos puede desalentar a una paciente, tranquila, optimista y sosegada persona, cofundadora de un partido que, si mal no recuerdo, tras el primer aniversario de su fundación, jamás ha puesto en cuestión candidatura alguna. Y podría hacerlo, dado que la juventud de Unión, Progreso y Democracia les daría licencia para alguna que otra puya.

Hablando de puyas: si los prebostes bipartidistas de Al Andalus se llevaron papel higiénico suficiente cuando se enteraron de lo de Kiki Díaz, que estén atentos a las próximas semanas: a los alcaldes de las ocho provincias andaluzas les va a doler la cabeza. Sobre todo al de Sevilla.

Ya lo decía Mario Benedetti: "No es exactamente cómo fundar una ciudad, sino más bien cómo fundar una dinastía". La dinastía de los que no le deben nada a nadie, de los resistentes, de los que caminan con la cabeza bien alta y no tienen que escribir un manual anticorrupción cada siete días.

Jesús Cascón es director de Bejarnoticias.com y subdirector de Granadinos.com

Kobol escribió: