UPyD exige tipificar como delito el negacionismo de los crímenes del franquismo o ETA

El negacionismo es un ataque contra la democracia

25 de Junio de 2013

El negacionismo ha preocupado a gobernantes, juristas y a muchas sociedades desde hace décadas, sobre todo desde la derrota del nazismo y la toma de conciencia de lo que había significado el Holocausto. Desde entonces no han sido pocos los intentos de falsear la historia para minimizar o incluso negar la existencia del genocidio de judíos y otras minorías a manos de la Alemania nazi. En un mundo horrorizado por lo que había ocurrido, resultaba patente que aquellas falacias eran algo más que mentiras, y que no podían ampararse en la libertad de expresión: eran una vejación a las víctimas y la semilla para futuras nuevas matanzas.

La preocupación por el negacionismo es la preocupación por los efectos de la mentira. En una sociedad democrática el pluralismo y la libertad son valores de primer rango. Se entiende que no corresponde a los poderes públicos sentar verdades oficiales, sino crear las condiciones para que se pueda debatir libremente. No es relativismo, sino realismo: la democracia no pretende acabar con el conflicto, sino canalizarlo y evitar sus consecuencias más sangrientas. Sin embargo, siempre se ha entendido que la libertad de expresión tiene sus límites. Por otra parte, la realidad demuestra que una idea demasiado ingenua del sistema democrático podría ponerlo en riesgo. En Alemania, donde Hitler accedió al poder ganando unas elecciones, eran más sensibles a esta evidencia y fueron pioneros en la tipificación y castigo del delito de negacionismo.

Desde entonces se han promovido un gran número de pactos internacionales contra el negacionismo y contra otras formas de exaltación de la violencia contra grupos minoritarios. Alguien que miente sobre la naturaleza del totalitarismo o del terrorismo no es sólo un imbécil moral, sino que puede ser un peligro para las minorías y para la sociedad en su conjunto, contra el que ésta tiene derecho a protegerse. La regulación del delito debe ser cuidadosa y preservar todas las garantías del Estado de Derecho. En España hay doctrina y análisis suficientes para guiar al poder legislativo en esta materia. 

Unión Progreso y Democracia ha presentado en el Congreso de los Diputados una iniciativa para que se regule el delito de negacionismo. Lo ha hecho tomando en consideración la jurisprudencia al respecto, los dictámenes de expertos, los grandes acuerdos supranacionales y la realidad española. Una realidad en la que todos los días se niega expresamente la existencia de crímenes abyectos como los cometidos por el terrorismo de ETA, a los que se pretende convertir en meros daños colaterales de una supuesta guerra justa. Las mentiras y las humillaciones a las víctimas son especialmente graves cuando se producen desde el ámbito parlamentario e institucional. Esta es la prueba más acabada de que la democracia debe tener los instrumentos para protegerse.

También el franquismo tiene sus negacionistas en España, como los tienen los crímenes del estalinismo en el propio bando republicano durante la Guerra Civil. Cuando algo está contrastado históricamente, cuando consta que existió y que dejó centenares, miles o millones de cadáveres, el Estado puede y debe proteger la memoria y resguardar esa verdad de la manipulación interesada, evitando que ésta se disfrace de libertad de expresión. Sólo la democracia garantiza el derecho a pronunciarse libremente. Yerran los miopes que no ven el peligro potencial del negacionismo para la propia libertad de expresión y para el resto de derechos fundamentales.

Editorial de UPyD

El Mundo: UPyD reclama que sea delito negar los crímenes de ETA o del franquismo

El País: El Congreso debatirá que sea delito negar los crímenes de ETA y del franquismo

Europa Press: UPyD pide tipificar como delito el negacionismo para evitar que se "reintepreten" los crímenes de ETA y el franquismo

Público: UPyD exige tipificar como delito el negacionismo de los crímenes del franquismo o ETA

20 Minutos: UPyD reclama en el Congreso que sea delito negar los crímenes de ETA o del franquismo

Beto progresista escribió:
Absolutamente de acuerdo con esta propuesta.
El haber metido en el mismo saco los crímenes de ETA y del franquismo ha debido dejar descolocados a unos y a otros que tienen a condenar solamente los crímenes que vienen "del otro bando".

El PP es absolutamente descafeinado con el franquismo e IU con ETA es de todo menos contundente.

Rosa Díez saca a la roja sectaria que lleva dentro y pide que sea delito cuestionar “los crímenes del franquismo”

Unión Progreso y Democracia (UPyD) ha registrado una proposición no de ley en el Congreso con la que insta al Gobierno a llevar a cabo las reformas legales necesarias para que se incorpore en el Código Penal el delito del negacionismo y evitar así que se “reinterpreten los crímenes del franquismo”. También quiere que se castigue “de manera adecuada” las conductas lesivas para la convivencia en una sociedad democrática.

El partido que lidera Rosa Díez considera que el negacionismo es un comportamiento “execrable” y ha puesto como un ejemplo “paradigmático” de este fenómeno la negación del holocausto nacionalsocialista, que defiende la no existencia del genocidio practicado por la Alemania nazi contra los judíos y los gitanos.

Pero, además, la formación magenta ha destacado que en España también existen negacionismos: como el que cuestiona “la represión franquista” o el que califica al “exterminio” de ETA como “violencia política”. Lo que no cuenta Rosa Díez es que antes de fundar su propio partido, ocupó importantes cargos vinculados al Partido Socialista de Euskadi. La irrupción de su fama nos llegó desde la Consejería de Turismo, de la que fue titular, gracias a la coalición entre su partido y el PNV. En aquellos años de oropeles y de pisar moquetas, la situación en Vascongadas no era algo que ni remotamente quitara el sueño a la bachiller de Sodupe (Vizcaya). Decía entonces Rosa Díez que “la realidad del País Vasco era la de sus gentes, una versión distinta a las historias que se contaban, siempre centradas en el terrorismo”.

Durante el tiempo que fue consejera de Turismo, entre 1991 y 1998, la banda terrorista ETA asesinó a 138 personas. De ellas, 57 en el País Vasco.

Esta multitud de sangre no hizo cambiar de idea a Rosa Díez, que seguía animando a la gente a venir a la comunidad autónoma vasca y luego contarlo. Rosa Díez pensaba entonces que la gente exageraba, que se contaban historias de Euskadi que no eran ciertas, que se distorsionaba lo que en realidad pasaba en el País Vasco, que la verdadera vida vasca aparecía opacada siempre por el terrorismo, cuando paseando por sus calles y conociendo a sus gentes, decía ella con entusiasmo, se podía comprobar que no era para tanto: 57 muertos en el País Vaso durante su estancia en el Gobierno de coalición con el PNV.

LA LIBERTAD DE EXPRESIÓN TIENE LÍMITES

Y aunque el partido magenta cree que la libertad de expresión es uno de los ejes centrales de los modernos regímenes democráticos, en los que ha alcanzando la consideración de derecho fundamental”, ha querido dejar claro que no es un derecho “absoluto”, sino que se encuentra sometido “a ciertos límites”.

De ahí que en su iniciativa, UPyD reclame como “imprescindible” que se tipifique el negacionismo, toda vez que el Tribunal Constitucional ha declarado “de forma reiterada” que el derecho fundamental a la libertad de expresión “no permite dar cobertura a manifestaciones innecesarias que atenten contra el honor, la dignidad o la libertad de las personas o que pongan en peligro el sistema democrático”, y ha interpretado que “la negación del genocidio puede ser delictiva como forma de incitación al odio, a la hostilidad o a la xenofobia”.

OCA escribió:Con una caricatura quizás valdría de borrador de "eljueves". Menudo "artí-culo"

El Estudiante. escribió:

OCA escribió:Con una caricatura quizás valdría de borrador de "eljueves". Menudo "artí-culo"

Es que "Alerta Digital" es el "Gara" de los neonazis españoles .